Nuestro viaje comenzaba un día 3 de Agosto a las 7,30 de la mañana en la cafetería Hontanares de Madrid. Allí nos juntábamos Mayte, Chus, Luis y el que escribe para emprender nuestro primer viaje al extranjero en moto acompañados de nuestras "sufridoras" y verdaderas animadoras de este proyecto.
DIA 1; Madrid-Barcelona.
Iniciamos nuestro viaje dirección Barcelona para ir a coger el ferry al día siguiente a Genova. Temperatura fresca y dos paradas por el camino y no hay nada más reseñable durante el viaje.
Ya en Barcelona quedamos con CarlesBMW y Ramona (ilustres foreros de Gerona) para tomarnos unas cervezitas y tentempié por la noche.
DIA 2; Ferry Barcelona-Génova (noche a bordo)
Por la mañan Mayte y Chus hicieron acopio de viandas en el Corte Inglés para la comida y la cena en el barco. A las 11,30 estábamos en la terminal del puerto, la primera fué en la frente; no daban las tarjetas de embarque hasta las 12,30. Una vez recogidas las tarjetas nos dirigimos al punto de espera y allí conocimos a 4 parejas catalanas que iban también en el mismo barco pero con distinto destino (realizaban un recorrido por Italia) y dos parejas de gallegos que también embarcarían con nosotros ( Alpes y Suiza).
El ferry a Génova no es nada del otro mundo, llevábamos camarote exterior y por lo menos ayudó algo a superar la monotonía. El viaje se hace pesado, salimos a las 15,30 rumbo a Génova y llegamos puntualmente a las 9 de la mañana del siguiente día con no muy buenas expectativas en cuanto al tiempo.
DIA 3; Génova-Ljubljana
Ahora empezaba realmente nuestro viaje, el día no presagiaba nada bueno, cielos encapotados y predicción de lluvia en todo el norte de Italia. Salimos del barco directamente con el mono de agua y ya sufriendo los primeros agobios de calor ya que la humedad era muy alta. A pesar de lo encapotado del cielo logramos llegar a Verona sin que nos caiga una gota de agua, paramos a comer y repostar y seguimos viaje. Aquí fué cuando se abrieron los cielos y empezó a descargar agua como yo no había sufrido antes, fueron cerca de 300 kms lloviendo a mares. El ritmo era de 60-70 km/h y daba miedo pasar al lado de los camiones de la cantidad de agua que desplazaban. Justo en la frontera con Eslovenia amainó un poco y paramos a comprar la pegatina de las autopistas (7,5 € por una semana), cosa muy recomendable ya que si te pillan si ella dentro del país te atizan 300€ de multa. Al final llegamos a Ljubljana sin novedad al Hotel Union Garni, totalmente recomendable, muy céntrico y al lado de la zona con más vida de Ljubljana. Fue coger la habitación, una ducha y salimos a dar una vuelta y buscar un sitio para cenar. No pudimmos tener más suerte y encontramos un restaurante mexicano que hizo que olvidaramos la dura jornada de viaje y disfrutaramos de una excelente cena a un precio inmejorable. Aquí podéis ver las cervecitas que nos tomamos acompañadas de muchas risas y excelentes fajitas y ribs.
faltaba la fotógrafa...
DIA 4; Cueva de Postojna y castilla de Predjama.
El día no amaneció muy halagüeño, nuebes amenazantes y fresquito, pero como era el primer día salimos totalmente decididos a por nuestros dos primeros objetivos en el viaje; la cueva de Postojna (la más grande de Eslovenia y que yo haya visto, 22 kms de cueva, de los cuales los 5 primeros se hacen en tren y luego un paseo de 2 kms andando). La visita a la cueva es totalemente recomendable, es un auténtico espectáculo para la vista y seguro que hará las delicias de los grandes fotógrafos por la cantidad de colores que dibujan los distintos minerales que componen las rocas de la cueva. No hay visita guiada en español, por lo cual nos arrimamos al grupo de los italianos y más o menos te enteras de todo. Las visitas guiadas son en Esloveno, Alemán, Inglés e Italiano. La sorpresa nos esperaba a la salida de la cueva, llovía de nuevo y con ganas, commo si no hubiera llovido en un año¡¡¡, así que tocó pertrecharse de nuevo con los monos de agua para seguir nuestro recorrido. Os pongo alguna foto de la cueva para que os hagáis una idea de lo que se puede ver...
este es el tren que nos lleva dentro de la cueva.
una vista imponente dentro la cueva.
a esta parte de la cueva la llaman la cúpula de los spaghetti
Eso sí las motos quedan a muy buen recaudo en una carpa cubierta que hay a la entrada de las cuevas y que además es gratuita, los coches deben pagar parking. Es una de las muchas muestras del respeto que tienen hacia las motos en Eslovenia.
Pertrechados con el mono de agua decidimos salir hacia Predjama (a escasos 9 kms de Postojna) para visitar su famoso castillo. A mitad de camino y debido a que ya eran las 14,30 hrs decidimos para a comer a mitad de camino del castillo. Fue una de las grandes decisiones de nuestro viaje, el lugar donde paramos era una cabaña que hay a mano izquierda yendo a Predjama regentada por una pareja joven que hacen unas hamburguesas espectaculares (en vez de carne picada te ponen un filete de ternera espectacular y buenísimo) acompañadas de unas fresquitas cervezas. El precio fue cosa aparte, las 4 cervezas de 3/4 de litro, cuatro hamburguesas y 4 capuchinos no llegó a los 18 euros.
Aquí tenéis alguna foto del castillo de Predjama
así se las gastaban aquí con los que se pasaban de la raya...
Salimos del castillo y de vuelta a Ljubljana los cielos volvieron a abrirse y decargar agua con todas sus ganas. Atasco monumental en la autopista ( de más de 45 kms) y nueva muestra del respeto a las motos en este país. Todos los coches, camiones y demás se iban abriendo a nuestro paso para dejarnos via libre en el atasco, vamos que igualiato que por aquí...
Para cenar repetimos mexicano, pues nos dejo con ganas y luego una copita y a dormir.
DIA 1; Madrid-Barcelona.
Iniciamos nuestro viaje dirección Barcelona para ir a coger el ferry al día siguiente a Genova. Temperatura fresca y dos paradas por el camino y no hay nada más reseñable durante el viaje.
Ya en Barcelona quedamos con CarlesBMW y Ramona (ilustres foreros de Gerona) para tomarnos unas cervezitas y tentempié por la noche.
DIA 2; Ferry Barcelona-Génova (noche a bordo)
Por la mañan Mayte y Chus hicieron acopio de viandas en el Corte Inglés para la comida y la cena en el barco. A las 11,30 estábamos en la terminal del puerto, la primera fué en la frente; no daban las tarjetas de embarque hasta las 12,30. Una vez recogidas las tarjetas nos dirigimos al punto de espera y allí conocimos a 4 parejas catalanas que iban también en el mismo barco pero con distinto destino (realizaban un recorrido por Italia) y dos parejas de gallegos que también embarcarían con nosotros ( Alpes y Suiza).
El ferry a Génova no es nada del otro mundo, llevábamos camarote exterior y por lo menos ayudó algo a superar la monotonía. El viaje se hace pesado, salimos a las 15,30 rumbo a Génova y llegamos puntualmente a las 9 de la mañana del siguiente día con no muy buenas expectativas en cuanto al tiempo.
DIA 3; Génova-Ljubljana
Ahora empezaba realmente nuestro viaje, el día no presagiaba nada bueno, cielos encapotados y predicción de lluvia en todo el norte de Italia. Salimos del barco directamente con el mono de agua y ya sufriendo los primeros agobios de calor ya que la humedad era muy alta. A pesar de lo encapotado del cielo logramos llegar a Verona sin que nos caiga una gota de agua, paramos a comer y repostar y seguimos viaje. Aquí fué cuando se abrieron los cielos y empezó a descargar agua como yo no había sufrido antes, fueron cerca de 300 kms lloviendo a mares. El ritmo era de 60-70 km/h y daba miedo pasar al lado de los camiones de la cantidad de agua que desplazaban. Justo en la frontera con Eslovenia amainó un poco y paramos a comprar la pegatina de las autopistas (7,5 € por una semana), cosa muy recomendable ya que si te pillan si ella dentro del país te atizan 300€ de multa. Al final llegamos a Ljubljana sin novedad al Hotel Union Garni, totalmente recomendable, muy céntrico y al lado de la zona con más vida de Ljubljana. Fue coger la habitación, una ducha y salimos a dar una vuelta y buscar un sitio para cenar. No pudimmos tener más suerte y encontramos un restaurante mexicano que hizo que olvidaramos la dura jornada de viaje y disfrutaramos de una excelente cena a un precio inmejorable. Aquí podéis ver las cervecitas que nos tomamos acompañadas de muchas risas y excelentes fajitas y ribs.
faltaba la fotógrafa...
DIA 4; Cueva de Postojna y castilla de Predjama.
El día no amaneció muy halagüeño, nuebes amenazantes y fresquito, pero como era el primer día salimos totalmente decididos a por nuestros dos primeros objetivos en el viaje; la cueva de Postojna (la más grande de Eslovenia y que yo haya visto, 22 kms de cueva, de los cuales los 5 primeros se hacen en tren y luego un paseo de 2 kms andando). La visita a la cueva es totalemente recomendable, es un auténtico espectáculo para la vista y seguro que hará las delicias de los grandes fotógrafos por la cantidad de colores que dibujan los distintos minerales que componen las rocas de la cueva. No hay visita guiada en español, por lo cual nos arrimamos al grupo de los italianos y más o menos te enteras de todo. Las visitas guiadas son en Esloveno, Alemán, Inglés e Italiano. La sorpresa nos esperaba a la salida de la cueva, llovía de nuevo y con ganas, commo si no hubiera llovido en un año¡¡¡, así que tocó pertrecharse de nuevo con los monos de agua para seguir nuestro recorrido. Os pongo alguna foto de la cueva para que os hagáis una idea de lo que se puede ver...
este es el tren que nos lleva dentro de la cueva.
una vista imponente dentro la cueva.
a esta parte de la cueva la llaman la cúpula de los spaghetti
Eso sí las motos quedan a muy buen recaudo en una carpa cubierta que hay a la entrada de las cuevas y que además es gratuita, los coches deben pagar parking. Es una de las muchas muestras del respeto que tienen hacia las motos en Eslovenia.
Pertrechados con el mono de agua decidimos salir hacia Predjama (a escasos 9 kms de Postojna) para visitar su famoso castillo. A mitad de camino y debido a que ya eran las 14,30 hrs decidimos para a comer a mitad de camino del castillo. Fue una de las grandes decisiones de nuestro viaje, el lugar donde paramos era una cabaña que hay a mano izquierda yendo a Predjama regentada por una pareja joven que hacen unas hamburguesas espectaculares (en vez de carne picada te ponen un filete de ternera espectacular y buenísimo) acompañadas de unas fresquitas cervezas. El precio fue cosa aparte, las 4 cervezas de 3/4 de litro, cuatro hamburguesas y 4 capuchinos no llegó a los 18 euros.
Aquí tenéis alguna foto del castillo de Predjama
así se las gastaban aquí con los que se pasaban de la raya...
Salimos del castillo y de vuelta a Ljubljana los cielos volvieron a abrirse y decargar agua con todas sus ganas. Atasco monumental en la autopista ( de más de 45 kms) y nueva muestra del respeto a las motos en este país. Todos los coches, camiones y demás se iban abriendo a nuestro paso para dejarnos via libre en el atasco, vamos que igualiato que por aquí...
Para cenar repetimos mexicano, pues nos dejo con ganas y luego una copita y a dormir.