Todos los que trabajáis con un PC os habréis dado cuenta que cada cierto tiempo el sistema operativo se actualiza automáticamente. Sobretodo si usáis Windows veréis cómo él mismo se conecta a Internet y se descarga unos programas que se autoinstalan al apagar el equipo. Realmente, dichos programas no son más que parches para corregir defectos o carencias del propio sistema operativo.
Pues bien, nuestras BMW también necesitan ser actualizadas en su “sistema operativo” ya sea debido a la premura con la que ha salido un nuevo modelo o, simplemente, a pequeñas deficiencias detectadas cuando ya llevaba un tiempo en el mercado. Para ello, se les instala un nuevo software que corrige esos fallos del funcionamiento de la máquina.
Un ejemplo de ello ha sido la mejora de la curva de potencia en las K1200S las cuales salieron de fábrica con un bache de potencia en torno a las 6.000 rpm el cual fue subsanado en la última actualización de su software. Obviamente, no sólo pueden corregirse baches de potencia sino también el comportamiento del motor, ralentí, etc.
Como bien le dijo alguien de BMW al “dire” si no fuera porque la gasolina se acaba en unos años el ser programador especializado en motores sería el trabajo del futuro ;)
Otro paralelismo lo encontramos en los nuevos modelos de la archiconocida R1200GS. Realmente han sido muy listos en el departamento de marketing de BMW y no han querido matar a la gallina de los huevos de oro con un diseño completamente nuevo así que podemos hablar más de una actualización o remodelación. De esta manera, cambiando un poco su diseño estético y su motor (con un 5% más de potencia y una curva más utilizable) consiguen luchar contra la cada vez más dura competencia a la par que no “defraudan” a los propietarios de la “antigua” con un cambio radical de imagen y prestaciones.
Además, en BMW van añadiendo pequeños cambios y detalles de los cuales no se hace publicidad. Simplemente tenéis que leeros el artículo aparecido hace unos meses en el que se hablaba de los cambios acontecidos en la 1200GS desde el modelo inicial del 2004 al modelo del 2007, justo la anterior a la remodelación. En él se veían cambios a simple vista tanto de chasis como de la pata de cabra, por ejemplo.
En fin, a mí personalmente me parece una idea brillante partir de una buena base e ir puliéndola poco a poco y sin hacer ruido. De esta manera se puede llegar a un producto refinado y cada vez más perfeccionado.
La pregunta clave es ¿estarán tan contentos los primeros usuarios de un modelo como los últimos? En principio no tienen por qué no ya que los cambios son apenas perceptibles pero, aún así, posiblemente algunos de ellos se sientan como conejillos de indias.
NOTA: Originalmente publicado en el año 2007
Este es el primero de una serie de artículos que se publicaron a lo largo de casi veinte años en varios medios, ya desaparecidos, como la revista digital BMWMOTO MAG, con Javier Olave como director y el Newsletter BMW MOTORRAD, con José María Alegre al frente.
Específicamente, este artículo fue publicado originalmente en la revista BMWMOTO MAG. El "dire" al que me refiero en él es Javier Olave.
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