Gadgets I - el GPS

En el año 1.884 la empresa Gaget, Gauthier & Cie, encargada de la fundición de la Estatua de la Libertad, acuñó la palabra Gadget al fabricar unas réplicas de la misma en miniatura como reclamo publicitario.

Poco a poco el significado de Gadget o Gizmo fue evolucionando y hoy en día se refiere a un dispositivo que tiene un propósito y una función específicos, generalmente de pequeñas proporciones, práctico y a la vez novedoso. Los gadgets suelen tener un diseño más ingenioso que el de la tecnología corriente, por norma general.

Existen decenas o tal vez cientos de Gadgets específicos para el mundo de la moto o bien que se pueden adaptar a él sin muchos problemas. Con este artículo vamos a iniciar una serie dedicada a los más importantes que podemos llevar o adaptar en nuestra BMW.

Últimamente se está poniendo muy de moda el GPS. Estas siglas son la abreviación de Global Positioning System. Dicho en cristiano es un sistema global de navegación por satélite el cual permite determinar en todo el mundo la posición de un objeto, una persona, un vehículo o una nave, con una precisión hasta de centímetros usando GPS diferencial, aunque lo habitual son unos pocos metros. El sistema fue desarrollado, instalado y actualmente es operado por el Departamento de Defensa de EEUU.

El GPS funciona mediante una red de 24 satélites (21 operativos y 3 de respaldo) en órbita sobre el globo a 20.200 Km. con trayectorias sincronizadas para cubrir toda la superficie de la tierra. Mediante ellos es posible triangular nuestra posición absoluta.

Hoy en día existen GPS específicos para motos tales como el Garmin Zumo o bien el TOMTOM Rider. Estos GPS están pensados para poderse operar con guantes ya que tienen pantalla táctil, son resistentes a las vibraciones y se pueden conectar a la batería de la moto o bien usarse con su propia batería interna que dura alrededor de unas cuatro horas antes de necesitar una recarga.

Hoy en día todos ellos llevan pregrabados los mapas de carreteras de Europa o, al menos, de España y Portugal, con lo que sabremos en todo momento donde nos encontramos. Además son autorrutables. Esto significa que dándoles un destino nos calculan automáticamente la ruta óptima de acuerdo con nuestras preferencias (normalmente ruta más corta o ruta más rápida) y, además, si nos equivocamos ellos mismos se encargan de recalcular de nuevo la ruta para que siempre podamos llegar a nuestro destino sin grandes problemas. 

No sólo sirven para encontrar “nuestro” camino sino que también incluyen puntos de interés como gasolineras, restaurantes, hoteles, cines, etc. etc. por lo que su utilidad se multiplica a la hora de salir de viaje. Además, últimamente también podemos incorporarles la red de radares fijos de España para que nos avisen con cierta antelación por lo que su compra puede estar amortizada en muy poco tiempo… si vivimos en zona de radares ;)

Obviamente, siempre hay detractores de las nuevas tecnologías que abogan por la belleza que conlleva el perderse cuando vas en moto pero yo siempre les digo que es perfectamente compatible una cosa con otra: simplemente debes pulsar el botón para apagarlo ;)

NOTA: Originalmente publicado en el año 2007
Este artículo pertenece a la serie que se publicó a lo largo de casi veinte años en varios medios, ya desaparecidos, como la revista digital BMWMOTO MAG, con Javier Olave como director y el Newsletter BMW MOTORRAD, con José María Alegre al frente.