Fallece Lorenzo Somaschini, piloto argentino de 9 años de edad.

El_Perola

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Cada vez que leo una noticia de estas se me hiela la sangre, pienso en sus padres y aparte de lo que estarán padeciendo, también lo que estarán pensando.....como si habrá merecido la pena perder a un hijo por una afición y un sueño.

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Fallece Lorenzo Somaschini, piloto argentino de 9 años de edad, tras sufrir un accidente en el SuperBike Brasil

Considerado el niño prodigio del motociclismo argentino, el pequeño se encontraba en terapia intensiva tras un accidente durante los entrenamientos de la Copa Honda Junio...
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Una verdadera desgracia, pobre familia.
Descanse en paz el chavalín.
 
Lo primero mis condolencias por la muerte del pequeño. Se lo que es la pérdida de un hijo por experiencia propia. Dicho esto, me ha venido a la memoria, un artículo que leí sobre los "niños soldados" en Africa. Los definía con gran capacidad de aprendizaje, programables y muy eficaces. Se me antoja que este niño fue un soldado en manos de sus padres que quizás con ilusión, pero también desde el desconocimiento, utilizaron la infantil ilusión del niño para, como suele suceder a los padres, proyectar los sueños no alcanzados en nuestros retoños. Los niños no están física ni psicológicamente preparados para acometer deportes de riesgo. Una bicicleta tiene ya sus riesgos no digamos ya una moto por pequeña que sea. Esta desgracia era perfectamente evitable. Los niños han de vivir como niños y no como adultos. Es una opinión discutible, por supuesto.
 
martin612 dijo:
Lo primero mis condolencias por la muerte del pequeño. Se lo que es la pérdida de un hijo por experiencia propia. Dicho esto, me ha venido a la memoria, un artículo que leí sobre los "niños soldados" en Africa. Los definía con gran capacidad de aprendizaje, programables y muy eficaces. Se me antoja que este niño fue un soldado en manos de sus padres que quizás con ilusión, pero también desde el desconocimiento, utilizaron la infantil ilusión del niño para, como suele suceder a los padres, proyectar los sueños no alcanzados en nuestros retoños. Los niños no están física ni psicológicamente preparados para acometer deportes de riesgo. Una bicicleta tiene ya sus riesgos no digamos ya una moto por pequeña que sea. Esta desgracia era perfectamente evitable. Los niños han de vivir como niños y no como adultos. Es una opinión discutible, por supuesto.
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No cambio ni una coma. Pienso lo mismo.
 
martin612 dijo:
Lo primero mis condolencias por la muerte del pequeño. Se lo que es la pérdida de un hijo por experiencia propia. Dicho esto, me ha venido a la memoria, un artículo que leí sobre los "niños soldados" en Africa. Los definía con gran capacidad de aprendizaje, programables y muy eficaces. Se me antoja que este niño fue un soldado en manos de sus padres que quizás con ilusión, pero también desde el desconocimiento, utilizaron la infantil ilusión del niño para, como suele suceder a los padres, proyectar los sueños no alcanzados en nuestros retoños. Los niños no están física ni psicológicamente preparados para acometer deportes de riesgo. Una bicicleta tiene ya sus riesgos no digamos ya una moto por pequeña que sea. Esta desgracia era perfectamente evitable. Los niños han de vivir como niños y no como adultos. Es una opinión discutible, por supuesto.
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Lo primero lamentar tu caso, es muy difícil superar ese trauma.
Lo segundo es que comparto totalmente tu opinión sobre lo que has escrito.
 
Hola

Lamento tu pérdida Martin.

Y sobre el artículo:

Pues como todos los que hay actualmente en parrilla, y en los deportes de élite. Si deseas hacer a un campeón comienza el entreno mientras gatea, es la única manera porque además del talento natural, hay que iniciarse lo antes posible para situarse capeón en las copas pequeñas. Supongo que los padres tendrán el riesgo asumido y sacrificaran mucha felicidad de sus hijos a cambio de ser campeones en un futuro, y serán conscientes de la situación desoladora si ocurre una desgracia semejante. Lo malo de todo esto es que muy pocos llegan a campeón, y del segundo no se acuerda nadie.

Si vemos reportajes de los hermanos Marquez cuando eran pequeños están en la misma situación, al igual que Jorge Lorenzo, al que su padre le exigía muchísimo para competir. Algunos llegan muy lejos y parecen felices como los primeros, otros como el segundo también han llegado a lo máximo pero en posteriores entrevistas ha declarado que corría por que era su trabajo, pero que no lo disfrutaba, y nunca ha sido feliz, otros pilotos tienen un gran potencial que se queda en humo por falta de padrinos, y en el menor de los casos otros pequeños pilotos truncan su vida porque sus padres decidieron impulsar una carrera en la competición, lo que nunca debería pasar.

Saludos. Fran.
 
Última edición:
Que desgracia....como padre se me pone la piel de gallina...entiendo que hay que empezar pronto, que es lo que le gusta al chaval, que será un prodigio,...pero creo que para no tener que escuchar estas noticias, tendrían que poner ciertas limitaciones o tomar algunas medidas porque con esa edad ni cuantifican los riesgos...

Descanse en paz.
 
Fran_GTS dijo:
Hola

Lamento tu pérdida Perola.

Y sobre el artículo:

Pues como todos los que hay actualmente en parrilla, y en los deportes de élite. Si deseas hacer a un campeón comienza el entreno mientras gatea, es la única manera porque además del talento natural, hay que iniciarse lo antes posible para situarse capeón en las copas pequeñas. Supongo que los padres tendrán el riesgo asumido y sacrificaran mucha felicidad de sus hijos a cambio de ser campeones en un futuro, y serán conscientes de la situación desoladora si ocurre una desgracia semejante. Lo malo de todo esto es que muy pocos llegan a campeón, y del segundo no se acuerda nadie.

Si vemos reportajes de los hermanos Marquez cuando eran pequeños están en la misma situación, al igual que Jorge Lorenzo, al que su padre le exigía muchísimo para competir. Algunos llegan muy lejos y parecen felices como los primeros, otros como el segundo también han llegado a lo máximo pero en posteriores entrevistas ha declarado que corría por que era su trabajo, pero que no lo disfrutaba, y nunca ha sido feliz, otros pilotos tienen un gran potencial que se queda en humo por falta de padrinos, y en el menor de los casos otros pequeños pilotos truncan su vida porque sus padres decidieron impulsar una carrera en la competición, lo que nunca debería pasar.

Saludos. Fran.
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No Fran , has entendido mal, gracias a Dios no ha sido mi caso, yo solo admiraba la entereza del compañero

martin612​

​

 
Que desgracia más grande. No quiero imaginarme estar en la piel de esos padres. Probablemente se sentirán culpables toda su vida por haber impulsado una afición tan peligrosa.
Pero dicho esto, nunca nos ponemos en lo peor, no pensamos que nos vaya a ocurrir a nosotros ... Y por desgracia a veces nos toca.
Haciéndolo extensible a nuestra afición, si pensáramos que un día podemos no volver a casa, seguramente venderíamos la moto.
Pero entonces no viviríamos o lo haríamos siempre con miedo.
 
Por partes, sobre la muerte de este joven piloto, una tragedia a todos los niveles. Mi más sentido pésame.
Segundo, sobre los pilotos que van para campeones del mundo, en todas las especialidades, la gran mayoría acaban odiando la moto. Lo he visto en trial y en cross, que es donde me nuevo profesionalmente.
Los padres se hipotecan, hacen un esfuerzo tremendo, y esa presión se la acaban pasando al hijo. El niño, al principio disfruta, porque gana pero cuando viene la sequía por ascenso de categoría, cuando empiezan a interesarse por las chavalas, o a cansarse de tanto viaje y/o lesiones, es cuando viene la cuenta atrás.

Esto es diferente a la historia que podamos contar nosotros. Para nosotros la moto era el mejor regalo del mundo, el premio a unas notas, el chantaje a que si te portaba mal te quitaban la moto, etc.

Es otra generación, otro modus vivendi.

Lo que si recalco es que el problema está en los padres. Muchas veces el padre agilipolla al niño, porque es el primero que piensa que va ser campeón. Y la función del padre, debe ser pragmática, ponerle los pies en el suelo al piloto y que el deporte le sirva de formación vital. Compartir tiempo con tu hijo en una afición comun. No un deporte en el que lavar tu frustración por no haber sido en esta vida uno más.
 
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