Otro que viene de Dubón Racing de probar la Adventure. Voy a intentar no repetir muchas cosas, pero siendo la misma moto, será un poco inevitable. Yo he hecho mucho trail heavy y enduro durante unos 15 años, así que aunque llevo como 10 años con motos de carretera, tampoco se me ha olvidado todo. En mis tiempos tenía una KLR a la que le ponía y quitaba las ruedas de tacos para salir al monte todos los fines de semana y una YTZ250 sin matrícula, así que lo de llegar a casa cubierto de barro era bastante habitual durante unos años antes de casarme. Después de aquello algunas trail de prensa en 2008 y 2009 como GS 1200 y 800, alguna 990 y poco más. Una decena de miles de kms, más o menos. Mis últimas 4 motos han sido de carretera, la actual una X11 con 140cv. Puestos en antecedentes para saber a lo que estoy acostumbrado, al grano.
Llego a Dubón y Óscar me tiene preparada la moto. La saca fuera para enseñarme un poco los modos de suspensión, de motor, controles de tracción y ABS... vamos, cursillo acelerado del uso de la electrónica. Tampoco me va a dar tiempo a probar mucho más, así que me fijo especialmente en los modos Street y sport y en cómo quitar y poner el control de tracción. Mido 1,81 tirando a paticorto, pero llego bien al suelo. Con un pie, que es mi postura habitual en parado, perfecto, pero con los dos llego levantando un poco los talones porque no llego a apoyarlos. La moto la notas grande cuando estás al lado, pero encima parece incluso pequeña. El asiento no me ha parecido duro ni blando. Me lo esperaba duro. Por la duración de la prueba no he podido sacar muchas conclusiones. Si no me ha llamado la atención ni para bien ni para mal, es que está bien. Las asas para el pasajero, que no cierran, creo que serían más útiles cerradas. Igual son manías mías.
El cuadro de instrumentos es bastante sencillo de manejar, aunque no me lo he llegado a aprender todo por falta de tiempo. En la izquierda están los settings modificables donde encuentras dos pantallas de trip1 y trip2 para parciales muy completos con range, consumo y demás, indicador de presiones de neumáticos, modo de las suspensiones para piloto de vacío, piloto cargado, piloto y pasajero, piloto con pasajero y carga (en la versión R se cambia con pomo manual, una cosa menos que se pueda estropear haciendo el cabra en offroad), mapping del motor para sport, Street, rain y offroad, controles de tracción y ABS también con varios modos y opción de desconectar, un favoritos con información de temperaturas y consumos, temperatura ambiental y de aceite... vamos, lo que toca y alguna cosa más, como la presión de los neumáticos. la presión de la delantera ha tardado un rato en mostrarla. En la derecha un cuentarrevoluciones analógico y velocímetro digital, indicador de marcha, la hora, nivel de gasolina... muy completo. Espartano a la austríaca, pero completo. Para mi gusto la aguja del cuentarrevoluciones se ve poco de día, pero si te pasas ya te avisa un testigo luminoso que sí se ve estupendamente. Por estar en rodaje se encendía a cada alegría que pretendía tomarme. El setting de los modos está en la piña izquierda y no tiene demasiado misterio. Botón SET que es el Enter por así decirlo, una flecha para arriba y otra para abajo para ir cambiando de pantallas y un botón de atrás. Tienes diferentes modos de suspensión, de ABS y control de tracción, puedes ajustar las suspensiones en modo Sport, Street y offroad. También ahí cambias los modos de motor y el primero es el sport, como recordándote que es ready to race... así que, ya está bien de ver la moto en parado. A ver qué tal se mueve.
Primera y salgo. El embrague es muy suave. Ronroneo bicilíndrico que ya me recuerda un poco al 990, pero más suave, más fino. El doble encendido no vibra, no da tironcitos. No es un tetra, ni siquiera un tri, pero ya no es la tosquedad del 990. El sonido es parecido al principio a bajas revoluciones y velocidad, pero las vibraciones no llegan. Luego te olvidas del sonido. Como el concesionario está en un polígono voy con cuidado en las rotondas, muy finitas y poco agarre, además de tráfico fluido pero que no te permite jugar. La moto hace exactamente lo que le pidas. Es muy fácil de llevar y de trazar. Me ha parecido enormemente noble. Ningún esfuerzo en adaptarme pese a las grandes diferencias de postura con mi montura habitual. Los mandos están en su sitio y no hay que buscar nada. Bueno, sí. Llevo una luz azul encendida... las largas. Al enseñármela en parado no las habíamos apagado. Están en el botón de las ráfagas, quizá lo único que no está donde siempre. Sin problemas. De paso reoriento un espejo.
Acelero un poco y lo primero que noto es que la moto está completamente amariconada. No hay duda de que es la que usó Goleta



. Es coña. La moto va muy bien. El motor empuja sin titubeos de ningún tipo. Empuja y empuja sin parar. Si haces una aceleración decidida puedes hacer saltar la luz roja del aviso de vueltas, que te avisa antes de que notes nada. El control de tracción también entra si aceleras pronto, pero me ha gustado la sensación. En la GS te impedía acelerar y era como si se te acabara la gasolina. Aquí no. Puedes seguir acelerando sin esa horrible sensación. En el modo sport puedes levantar la moto a la salida de curva/rotonda incluso aunque se mantenga encendida la luz de aviso de que está actuando. Un punto a favor en este control de tracción, mucho más divertido, aunque quizás imponga respeto a quienes no estén acostumbrados a derrapar. Aún así a mí no me gusta que me domen, pero bueno, ya lo desconectaré luego. Estiro un poco marchas para alejarme de los polígonos industriales de la zona. Sin darme cuenta supero los 160. Nada vibra, nada tiembla, no da la sensación de velocidad que llevo. Vamos, perfecto. Hay que mirar más la velocidad, porque corre mucho sin dar sensación de hacerlo, lo que te indica que protege muy bien con la pantalla en modo bajito. Es posible que vaya mejor subida, pero no lo he hecho. O me doy prisa o no voy a llegar a ninguna curva, y las primeras están ya saliendo de Torrent de camino a Montserrat, pero finalmente me he dado la vuelta antes de cruzar la A7 pues me faltaban pocos minutos. El reloj de la moto y su cruel avance me indica que o vuelvo, o me reñirán. Aprovecho un tramo recto y sin tráfico para frenar fuerte. Frena muy bien. Muy muy bien. Si inicias de atrás con el ABS puesto en asfaltos deslizantes, notas el traqueteo del ABS en el pie, no tan exagerado como el de la BMW, pero quizás tan prematuro como con la alemana. Es desconectable, aunque supongo que a todo se acostumbraría uno. Yo por mí lo dejaría para ciudad y para lluvia, al menos el trasero.
Los modos de conducción. Con 10cv más que mi moto, no me esperaba muchas sensaciones espectaculares, pero los ContiAttack que monta son mucho más blandos que los PilotRoad que monto yo en la mía, así que sí noto más tirón inicial e instantaneidad de respuesta. La moto es muy viva, responde muy bien a aceleraciones y recupera bien. Empuja contundentemente en cualquier marcha. Además el acelerador electrónico mola mucho. Claro que también mola que tenga mucha fuerza, empuje sin cesar vayas en la marcha que vayas y me gustan esos controles de tracción con 4 niveles distintos (sport, Street, rain y offroad) que permiten desde conducir monitorizado completamente por la electrónica hasta dejarte derrapar razonablemente en conducción deportiva, pero sin dejarte que se desmelene la cosa demasiado. En Rain y Offroad baja la potencia a 100cv, más que suficientes para la mayoría de ocasiones y, la verdad, tampoco es que vayas exprimiendo más allá cuando el agarre es precario. Los dejaremos también para cuando llueva... También está la quinta opción de desconectarlo totalmente. Yo he probado Street y sport y por el tiempo y zona de la prueba, tampoco es que se note demasiada diferencia, pues no he podido exprimir la moto por tráfico y por estar en rodaje (ni 300kms). Sí se nota cuando lo quitas, que te cruza la moto como te descuides, pero sin hacerme más a ella y sus límites, tampoco es cuestión de ir haciendo el tontainas más de la cuenta, no sea que me toquen la cuenta... corriente. Un par de derrapadas y listo. La he llevado más rato en el modo sport y no te das ni cuenta de que lo llevas. Vamos, que nada intrusivo. Ese modo debe ser un puntazo para ir de curvas. Cuando cambias de modo te invita a cortar gas un instante para acabar de activarse, pero puedes hacerlo perfectamente en marcha.
Sobre el C-ABS, el famoso ABS para curvas, con el tráfico que había no habría tenido opción de probarlo sin arriesgarme a una sonora pitada, cosa que no me hace ni pizca de gracia cuando los que te pitan son camiones que pueden no frenar a tiempo. Lo dejaremos para otra ocasión, aunque me apetecía mucho comprobarlo en persona para que no me lo cuente el folleto de la marca. La 1190 frena fenomenal, pero en una prueba de unos 20 minutos que me han dejado, que ha acabado siendo de 35, ya no me daba tiempo a mucho.
Sobre suspensiones, las he llevado casi todo el tiempo en sport. Acostumbrado ahora a una moto de carretera, era lo que más se iba a parecer, y de hecho me ha gustado. Es lo suficientemente dura como para ir fuerte y siempre tienes las opciones blandas para offroad. En todo momento tienes información de lo que ocurre en el tren delantero, transmiten muy bien. Aunque los levers tienen muchas ventajas, a mí no me convencen demasiado para ir fuerte por la falta de información. Me gusta más sentirlo todo. Y para campo, ni color. Esta moto es trail claramente y puedes pasar baches, badenes y pasos de peatones elevados como si nada sin bajar velocidad. Vamos, lo que hace cualquier trail. La versión R, todavía mejor para baches, pues es la versión más off.
Sobre el calor en el asiento, yo no he notado nada. Supongo que se notará más cuando estás acostumbrado a un bóxer con los cilindros ventilándose fuera. Cualquier moto con el motor completamente debajo del deposito da calor y aunque hacía sol y casi 25ºC, incluso me ha parecido que daba menos calor que la mía. Iba con vaqueros y no he sentido nada. Claro que tampoco he ido chafando huevos ni apenas he parado, con lo que igual ha ido bien ventilada.
Ya de vuelta he buscado un camino alternativo, más bacheado, para llegar a Paiporta por detrás, y con la suspensión más blanda se lo come todo como si estuviera bien asfaltado. Ponía de ir a 30 y, a unos 100 por encima de eso, iba fantástica. :cheesy:
Una cosa que me escama. Al llegar al concesionario no podía despegarme la llave de la mano. No sé si es un defecto de fábrica o qué, pero me sentía apurado porque no llevaba bastante dinero encima para llevármela. Al final con una radial han conseguido desprenderla... Qué mal rato!! En fin, que la moto es muy completa, muy divertida, muy noble, va por raíles, frena estupenda, da mucha seguridad... me ha gustado muchísimo.
Sobre el tema concesionarios en Madrid, no sabría decir. En Dubón Racing (Paiporta - Valencia) me han tratado estupendamente, me han explicado todo y me han dado cancha para charlar después de la prueba, que ya es decir, porque yo soy igual de rollero en el foro que en persona. Me quedo con las ganas de una prueba más larga en tiempo y kms, y con la asignatura pendiente de probarla en campo, pero más la R, la versión más offroad. Tampoco he visto las posibilidades de equipamiento de viaje, ni defensas, ni la versión R, que es la que me hubiera gustado probar, pero bueno, como base es una gran moto. Después de todo lo que había leído sobre ella, no me ha decepcionado, que no es poco.
Me ha cambiado la opinión de que la KTM es siempre una moto radical. Esta nueva hornada de KTMs es fácil de conducir, tan fácil como quieras. Puede ser dócil o bestia, con un montón de niveles intermedios para disfrutarla sea cual sea tu nivel de técnica de conducción. Con todas las ayudas la puede llevar cualquiera. Si sabes más, puedes ir quitando ayudas hasta donde te sientas cómodo sin que te lleven de la manita. Y siempre tienes la opción de "toda tuya" en la que más vale que sepas lo que haces. La sonrisa de oreja a oreja está garantizada. Y tambien la vuelta a casa pensando en... ¿en qué va a ser? en lo de siempre!!!
Aquí os dejo esa sonrisilla que se te queda, nada más conseguir que me sacaran la llave de la mano: