Cada día disfruto más en la arena y si es en buena compañía, pues más todavía. Salida cañera: por el ritmo, por las condiciones del terreno y por el calor... y por ese homenaje que nos dimos a mediodía, tan cañero como la ruta... ¡¡cómo estaba el choto, pardiéz!
Al margen de alguna que otra caída sin más consecuencias -por otro lado algo normal en ese terreno-, sólo hubo que lamentar el talegazo de Ramón :'( . Al final parece que se han confirmado las sospechas y tiene una fisura en la costilla... ¡Si es que no se puede llevar todo ese mazo de dinero en la cartera, hombre!, que luego te caes y te lo metes hasta el corvejón. Eso es lo que debe ser lo de "meter el clavo"
... Y una vez más se demuestra que el dinero no sólo no da la felicidad, si no que a veces hasta es capaz de acabar con la poca o mucha que pueda haber. En fin, mejórate, montaráz.
Menos doloroso y en otro nivel, también hubo que lamentar la pérdida del movíl de Ziervo... que en este caso -ahora si-, si que es una cuestión que se resuelve con unos cuantos billetes... Mira, pues al final va a ser que el dinero también puede hacernos felices o al menos hacer que las penas pasen mejor, hombre. No si al final si esta ahí será por algo -el dinero, digo-. Nada, Ziervo, no te preocupes; te compras otro terminal, te pegas la currada de recuperar los teléfonos que allí llevaras y me haces el favor de no "machacar" el terminal abandonado, ya que si tu no lo vas a poder utilizar más, al menos que lo use un resinero, si es que algún buen hombre llega a encontrarlo.
No hagas como yo, que perdí el teléfono en Marruecos y cuando me preguntaron si además de la tarjeta quería inutilizar el terminal per secula seculorum, dije que "si". Desde entonces siento que mi alma se ha condenado y que esta pena la tendré que purgar en el purgatorio -que es el sitio adecuado parta purgar lo que sea menester, tal y como su propio nombre indica-, pues si para mi ya no tenía utilidad alguna, ¿por qué no dejar que otro -el felíz hallador- se refocilara con semejante hallazgo? Malos somos y poco flagelo nos dan para todo el que merecemos, pardiéz. [smiley=tongue.gif]
Tras la singular pitanza a base de choto astur que la mayoría nos endiñamos y muerta ya la mañana, algunos montaraces insaciables salimos a dar cuenta todavía de algunos kilómetros más de campo. Agonizantes como boas, nos metimos otro generoso tramo como variante a las previas salidas por la zona, que el bueno de David había descubierto mirando y remirando entre mapas y fotografías aéreas del paraje. Bien por ese tramo.
Allí me "griparon" los antebrazos y más que yo ordenaba abrir la mano, las garras se cerraban sobre la muñeca sin solución, quedando aquello más tieso que la mojama. Pero como uno es duro de pelar y los únicos pantalones que cedo son los que a veces lleva mi mujer, me empeciné en arreglar el desperfecto y seguir adelante si o si. Al cabo, terminé aquel generoso tramo, que tanta arena o más que los anteriores nos había brindado.
En la gasolinera bebieron las bestias y bebimos los bestias, en un intento de reponer líquidos unos y otros. Y desde allí partieron otros varios montaraces en sendas direcciones, despidiéndose del día y de los que allí quedamos con aviesas intenciones: Wazzup "El Insaciable" y Maese Ernesto, que tampoco sacia facilmente, no.
Más puesto todo el empeño, todo fue en vano, pues nada más sacaba ya de aquellos antebrazos. Eso si, aún nos dió tiempo a enhuertarnos y a pisar la parte más salvaje de las arenas. En fin, que hubo uso y disfrute hasta donde buenamente pudimos.
Regreso, con nube, nubarrón y pequeño chaparrón, que disfrutamos a la sombra de una cerveza mientras volaban sombrillas a nuestro alrededor... Bueno, casi como ver la teletonta, pero menos tonto que zampar los aires viciados que emponzoñan nuestras ondas, pues allí lo único que había era ozono y olores del campo. ¡Qué tarde, casi de verano!
Pues hasta ahí puedo contar y aunque nada más puede leerse en la tarjetita que llevo entre las manos, aquí, a diferencia del "1, 2, 3", nadie se llevó la calabaza y todos salimos premiados: unos con parcelas, otros con un choto -aunque en piezas fue llevado- y los más afortunados con ese recuerdo indeleble que jornadas como esta deján para siempre guardados en nuestro corazón. Y no hay mejor tesoro que aquello que podemos llevar siempre a cuestas allá donde vayamos.
... Ah, y el apartamento en Benidorm para su **** madre. A mi que me den moto y choto... ¡generoso que es uno, pardiéz! [smiley=engel017.gif] [smiley=evil.gif]
Ea, con Dios montaraces.
P.D.: Ahí van algunas de mis fotos... Parco en apretar el gatillo fuí esta vez, que no se puede estar a todo: a la pista, a la arena, al track del gipsy ese, al grupo que detrás venía, al choto del mediodía y al gatillo de la cámara... vamos, que todavía podría haberme puesto un plumero en el tercer ojo para ir barriendo el campo al paso y encima sin cobrar. ¡¡JA!!... hasta ahí podíamos llegar. El que quiera verse que se pague un viaje astral.
Si es que lo queremos tener todo y no se puede, no se puede...
... Y alguna más -poco más esta vez- en
www.wazzup.smugmug.com