Esto es un tema más complejo de lo que parece. Y se de lo que hablo. Los conces son las personas, para bien o para mal. Muchas veces hablamos de conces y en realidad se trata de Talleres Autorizados agentes de otros conces. Las normas a aplicar en todos son las mismas pero de lo que se trata basicamente es de como se gestionen. Me explico; En un conce se paga más que en un taller libre y contrariamente a lo que se piensa no es que el beneficio vaya en la misma proporción que la diferencia de precio con un taller libre, pero si el usuario paga más espera profesionalidad por un lado y lo que más nos duele por otro, como usuarios, es que tengamos una avería gorda y la marca se desentienda de la misma y es ahí donde el conce se puede distinguir. No está en mano del conce obligar a las marcas a asumir garantías si estas no están dispuestas, pero existen muchos miodos de presionar a ñla marca desde el conce para que determinadas cosas se aprueben. Es cierto que las reparaciones en garantía que son gordas las marca las paga al concesionario incluso por debajo de coste de mano de obra y a precio de coste los recambios pero son un valor comercial incalculable para el conce.
El conce también debe valorar con quien se la juega y alguno dirá que es injusto pero es así por mucho que no nos guste. No todos los clientes son iguales ni la repercusión de los mismos la misma. Es muy importante distinguir unos de otros y dar el do de pecho cuando hay que darlo. Esto es así porque muchas de las reclamaciones a la marca son rechazadas y hay que seleccionar en cuales desgastarse personalmente para tener probabilidades de éxito. No es lo mismo un incondicional de la marca o modelo que un cliente que ha pasado por todas las marcas y compra en función de criterios puntuales y cuya duración de las motos en sus manos es corta, por ejemplo.
Una buena gestión comercial implica provisionar todos los ejercicios una cantidad de dinero destinada a tapar pequeñas averías que no suponen gran cosa, que prefieres no pelear con la marca en aras de otras más importantes pero que a la postre esas pequeñas cosas significan tener un cliente insatisfecho.