Este es el poéma más conocido de este pastor protestante encarcelado por Hitler (erroneamente atribuido a Bertolt Brecht):
[highlight]"Primero vinieron a buscar a los comunistas y no dije nada porque yo no era comunista.
Luego vinieron por los judíos y no dije nada porque yo no era judío.
Luego vinieron por los sindicalistas y no dije nada porque yo no era sindicalista.
Luego vinieron por los católicos y no dije nada porque yo era protestante.
Luego vinieron por mí pero, para entonces, ya no quedaba nadie que dijera nada".[/highlight]
Esta es su fascinante historia:
"Del submarino al púlpito"
En 1933, Niemöller ganó fama por un libro, Del submarino al púlpito , que narraba su vida y su transformación de comandante de un submarino durante la I Guerra Mundial a pastor de una iglesia protestante. El libro no es una de esas sagas de guerrero-se-convierte-en- pacifista, porque niemöller sentía mucho orgullo por su carrera naval y también por sus actividades en el Freikorps , una organización de veteranos contrarrevolucionarios que atacaba al movimiento obrero revolucionario de Alemania tras la I Guerra Mundial. La prensa nazi de ese tiempo elogió el libro y fue uno de los más vendidos durante los primeros años del gobierno nazi. En la conclusión del libro, niemöller celebró la llegada al poder de los nazis y el "renacimiento nacional" que suscitaron.
niemöller no era único en eso. El libro de William Shirer El ascenso y la caída del Tercer Reich dice que la mayoría de los pastores protestantes se alegraron con el "advenimiento" de Hitler. Sin embargo, en 1934 Hitler trató de combinar a la fuerza las muchas sectas protestantes en una sola "Iglesia del Reich" y hacer que adoptaran una ideología más conforme a los nazis. niemöller, el líder de la iglesia Confesionaria, no quiso ceder la autonomía y en mayo de 1934 la iglesia Confesionaria declaró que era la legítima iglesia protestante del país, en oposición a los deseos nazis. Siguieron varios años de batallas y treguas precarias; el nivel de fricción escaló pero mayormente se centraba en las medidas nazis respecto a la iglesia. Por ejemplo, niemöller se opuso a la prohibición de que los judíos conversos fueran ministros protestantes y, después, a las medidas que los confinaban a iglesias segregadas, aisladas de los demás protestantes. Sin embargo, no se opuso a las medidas generales contra los judíos y otros grupos.
Aunque su conflicto con los nazis aumentaba, niemöller se cuidó de no traspasar ciertos límites. Hasta intentó superar a los nazis en patriotismo y les dijo a sus amigos que Hitler era un hombre inteligente pero que lo rodeaban imbéciles y charlatanes. Cuando Dietrich Bonhoeffer, un teólogo protestante que también era pastor de la iglesia Confesionaria, exhortó a los cristianos a ayudar a los judíos y a tomar medidas directas contra la persecución, niemöller le contestó que la iglesia tenía que preocuparse de su propia seguridad antes de alzar la voz por otros.
Al final, nada de eso ayudó ni a niemöller ni a su iglesia. En mayo de 1936, cuando la iglesia Confesionaria rechazó ciertos aspectos del antisemitismo oficial y pidió de nuevo un alto a la intervención en asuntos eclesiásticos, los nazis arrestaron a centenares de pastores, confiscaron las arcas de la iglesia y asesinaron a un pastor muy conocido. El 1° de julio de 1937, a niemöller --ex comandante de submarino, autor de libros supervendidos, famoso pastor de una parroquia adinerada y ex niño mimado de la prensa nazi-- lo arrestaron. Pasó ocho años en cárceles y campos de concentración nazis, con cuatro años de aislamiento.
En el año 1937, niemöller y los demás pastores arrestados estaban solos, pues la gran mayoría de las iglesias protestantes se habían rendido al gobierno. Después del arresto de niemöller, la iglesia Confesionaria también votó por cooperar más con el gobierno y ¡le agradeció la revitalización de la vida alemana! niemöller no salió en libertad hasta la derrota de Alemania en 1945.
"¿Qué habría pasado?"
En enero de 1946, los representantes de la iglesia Confesionaria se reunieron en Frankfort para debatir su reconstitución. Una vez más, niemöller subió al púlpito, pero dio un sermón muy diferente. Primero (y en esto hablaba por muchas personas), detalló las excusas que dio para no alzar la voz: sí, Hitler atacó a los comunistas, pero ¿no eran ateos y revolucionarios? Y sí, aniquiló a los incapacitados y los enfermos, pero ¿no eran una carga para la sociedad? Y claro, agarrar a los judíos era deplorable, pero ¿los judíos no son cristianos, verdad? Y lo de los países ocupados era una lástima, pero por lo menos eso no ocurrió en Alemania ¿no es cierto?
Ninguna excusa justificaba todo eso, reiteró.
Dijo: "No podemos negar [la necesidad de expiación] con la excusa de que `me habrían matado si hiciera algo''.
[highlight]"Preferíamos mantener silencio. Claramente no somos inocentes y me pregunto una y otra vez: ¿qué habría pasado si en el año 1933 ó 1934, 14,000 pastores protestantes y todas las comunidades protestantes de Alemania hubieran defendido la verdad hasta la muerte? Si hubiéramos dicho: `No es correcto que Hermann Göring simplemente meta en campos de concentración a 100,000 comunistas para que mueran'. Puedo imaginar que tal vez 30,000 ó 40,000 cristianos protestantes habrían muerto, pero también puedo imaginar que habríamos salvado a 30 ó 40 millones de personas, porque eso es lo que [el silencio nos costó]".
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[highlight]"Primero vinieron a buscar a los comunistas y no dije nada porque yo no era comunista.
Luego vinieron por los judíos y no dije nada porque yo no era judío.
Luego vinieron por los sindicalistas y no dije nada porque yo no era sindicalista.
Luego vinieron por los católicos y no dije nada porque yo era protestante.
Luego vinieron por mí pero, para entonces, ya no quedaba nadie que dijera nada".[/highlight]
Esta es su fascinante historia:
"Del submarino al púlpito"
En 1933, Niemöller ganó fama por un libro, Del submarino al púlpito , que narraba su vida y su transformación de comandante de un submarino durante la I Guerra Mundial a pastor de una iglesia protestante. El libro no es una de esas sagas de guerrero-se-convierte-en- pacifista, porque niemöller sentía mucho orgullo por su carrera naval y también por sus actividades en el Freikorps , una organización de veteranos contrarrevolucionarios que atacaba al movimiento obrero revolucionario de Alemania tras la I Guerra Mundial. La prensa nazi de ese tiempo elogió el libro y fue uno de los más vendidos durante los primeros años del gobierno nazi. En la conclusión del libro, niemöller celebró la llegada al poder de los nazis y el "renacimiento nacional" que suscitaron.
niemöller no era único en eso. El libro de William Shirer El ascenso y la caída del Tercer Reich dice que la mayoría de los pastores protestantes se alegraron con el "advenimiento" de Hitler. Sin embargo, en 1934 Hitler trató de combinar a la fuerza las muchas sectas protestantes en una sola "Iglesia del Reich" y hacer que adoptaran una ideología más conforme a los nazis. niemöller, el líder de la iglesia Confesionaria, no quiso ceder la autonomía y en mayo de 1934 la iglesia Confesionaria declaró que era la legítima iglesia protestante del país, en oposición a los deseos nazis. Siguieron varios años de batallas y treguas precarias; el nivel de fricción escaló pero mayormente se centraba en las medidas nazis respecto a la iglesia. Por ejemplo, niemöller se opuso a la prohibición de que los judíos conversos fueran ministros protestantes y, después, a las medidas que los confinaban a iglesias segregadas, aisladas de los demás protestantes. Sin embargo, no se opuso a las medidas generales contra los judíos y otros grupos.
Aunque su conflicto con los nazis aumentaba, niemöller se cuidó de no traspasar ciertos límites. Hasta intentó superar a los nazis en patriotismo y les dijo a sus amigos que Hitler era un hombre inteligente pero que lo rodeaban imbéciles y charlatanes. Cuando Dietrich Bonhoeffer, un teólogo protestante que también era pastor de la iglesia Confesionaria, exhortó a los cristianos a ayudar a los judíos y a tomar medidas directas contra la persecución, niemöller le contestó que la iglesia tenía que preocuparse de su propia seguridad antes de alzar la voz por otros.
Al final, nada de eso ayudó ni a niemöller ni a su iglesia. En mayo de 1936, cuando la iglesia Confesionaria rechazó ciertos aspectos del antisemitismo oficial y pidió de nuevo un alto a la intervención en asuntos eclesiásticos, los nazis arrestaron a centenares de pastores, confiscaron las arcas de la iglesia y asesinaron a un pastor muy conocido. El 1° de julio de 1937, a niemöller --ex comandante de submarino, autor de libros supervendidos, famoso pastor de una parroquia adinerada y ex niño mimado de la prensa nazi-- lo arrestaron. Pasó ocho años en cárceles y campos de concentración nazis, con cuatro años de aislamiento.
En el año 1937, niemöller y los demás pastores arrestados estaban solos, pues la gran mayoría de las iglesias protestantes se habían rendido al gobierno. Después del arresto de niemöller, la iglesia Confesionaria también votó por cooperar más con el gobierno y ¡le agradeció la revitalización de la vida alemana! niemöller no salió en libertad hasta la derrota de Alemania en 1945.
"¿Qué habría pasado?"
En enero de 1946, los representantes de la iglesia Confesionaria se reunieron en Frankfort para debatir su reconstitución. Una vez más, niemöller subió al púlpito, pero dio un sermón muy diferente. Primero (y en esto hablaba por muchas personas), detalló las excusas que dio para no alzar la voz: sí, Hitler atacó a los comunistas, pero ¿no eran ateos y revolucionarios? Y sí, aniquiló a los incapacitados y los enfermos, pero ¿no eran una carga para la sociedad? Y claro, agarrar a los judíos era deplorable, pero ¿los judíos no son cristianos, verdad? Y lo de los países ocupados era una lástima, pero por lo menos eso no ocurrió en Alemania ¿no es cierto?
Ninguna excusa justificaba todo eso, reiteró.
Dijo: "No podemos negar [la necesidad de expiación] con la excusa de que `me habrían matado si hiciera algo''.
[highlight]"Preferíamos mantener silencio. Claramente no somos inocentes y me pregunto una y otra vez: ¿qué habría pasado si en el año 1933 ó 1934, 14,000 pastores protestantes y todas las comunidades protestantes de Alemania hubieran defendido la verdad hasta la muerte? Si hubiéramos dicho: `No es correcto que Hermann Göring simplemente meta en campos de concentración a 100,000 comunistas para que mueran'. Puedo imaginar que tal vez 30,000 ó 40,000 cristianos protestantes habrían muerto, pero también puedo imaginar que habríamos salvado a 30 ó 40 millones de personas, porque eso es lo que [el silencio nos costó]".
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