El W&W en realidad nunca se celebró en el centro de Biarritz. Los primeros años tuvo lugar en el Faro, por lo que, eso sí, había que cruzar el centro. Al crecer en asistentes, se decidió, ya el año pasado, trasladarlo a un espacio más grande y situado en las afueras, la Cité de l'Oceán. Este año se volvió a celebrar allí. Lo que sí que se trasladó (a Pasajes) fue la exposición Art Ride, que antes se instalaba en una nave en Biarritz.
En cuanto a los incidentes del viernes, no fue exactamente una pelea. Unos graciosos se dedicaron a quemar rueda y hacer ruido enfrente del "Miguel", uno de los sitios emblemáticos de copas de Biarritz. Ante el lío, apareció la Policía municipal a poner orden y se dedicó a multar a todas las motos que estaban mal aparcadas. Cosas que tienen estos eventos cuando crecen tanto.
Por lo demás, un evento bastante recomendable, muchas motos y muchas ideas, tanto en las motos que estaban dentro del recinto como en la de los asistentes, con cientos de BMW con las más variopintas terminaciones. La pena, la lluvia del viernes, que hizo poco menos que imposible moverse en moto por la infernal carretera que va hacia Hondarribi (en nuestro caso, con accidente y visita al hospital de Irún).
Saludos