Britten
Curveando
Hay diferentes formas de atajar las crisis en las marcas de coches. Algunas, como Stellantis, hablan de soltar lastre para así disminuir las pérdidas, y eso es algo que en Volkswagen no contemplan. Los dos son gigantes en la industria del automóvil, pero los alemanes también son propietarios de una marca italiana y arrastra años sumida en una profunda crisis.
Hablamos de Ducati. La marca de las motos rojas sale a la palestra cada vez que Volkswagen está con el agua al cuello, sugiere la posibilidad de desprenderse de esta marca de dos ruedas, pero resiste a la la tentación de hacerlo. Ni siquiera el cartel que tiene en el mundo de la competición, con más de una decena de títulos, es suficiente para levantar la losa que tiene encima desde hace ocho años.
Sí, estamos de acuerdo que sus modelos son caros, pero las motos de BMW también lo son y, solo el año pasado, llegaron hasta las 210.408 vendidas. La diferencia es notablemente considerable.
Una marca en la que no hay problemas como los de KTM, que cuenta con el importante respaldo financiero de Audi por detrás y que, después de ingresar 840 millones de euros por ventas y pagar impuestos, el beneficio después de impuestos es de solo 91 millones de euros, está claro que tiene problemas serios.
La Panigale es una moto deportiva con toda la herencia de las que corren en MotoGP. Presume de tecnología y prestaciones, pero este tipo de motos ya no tienen tanto interés como hace años; y, la Monster, que siempre ha sido el modelo de volumen, acabó estrellándose cuando la marca trató de abaratarla prescindiendo del chasis tubular y sustituyendo metal por plástico. La han llegado a calificar como una moto china...
El precio es un problema como rebajar la calidad a unas motos de categoría Premium, pero también el hecho de que Ducati se ha centrado (más de la cuenta) en lo Premium. Sus modelos más baratos siguen siendo más caros que los rivales, y solo en Italia tiene buen cartel. Las casi 10.000 unidades vendidas en 2024 lo corroboran, pero en Estados Unidos o Alemania, la situación es muy diferente con 6.993 y 6.575 unidades, respectivamente, y cada vez menos.
MOTOR.ES
Hablamos de Ducati. La marca de las motos rojas sale a la palestra cada vez que Volkswagen está con el agua al cuello, sugiere la posibilidad de desprenderse de esta marca de dos ruedas, pero resiste a la la tentación de hacerlo. Ni siquiera el cartel que tiene en el mundo de la competición, con más de una decena de títulos, es suficiente para levantar la losa que tiene encima desde hace ocho años.
Ducati es cara pero el precio no es el único problema
El año pasado, Ducati vendió solo 54.495 motos en todo el mundo, lo que supone una disminución del 6,4 % respecto al año anterior. Una cifra en la que los italianos se vienen moviendo desde 2017 cuando sus ventas alcanzaron las 55.451 unidades. En 2024, solo 44 más, y en 2020, incluso bajaron considerablemente hasta las 48.042..Sí, estamos de acuerdo que sus modelos son caros, pero las motos de BMW también lo son y, solo el año pasado, llegaron hasta las 210.408 vendidas. La diferencia es notablemente considerable.
Una marca en la que no hay problemas como los de KTM, que cuenta con el importante respaldo financiero de Audi por detrás y que, después de ingresar 840 millones de euros por ventas y pagar impuestos, el beneficio después de impuestos es de solo 91 millones de euros, está claro que tiene problemas serios.
Presumir de tecnología y rebajar la calidad, el problema de Ducati
Sus motos son potentes, muy deportivas y la tecnología que equipan es de última generación, pero hay una razón por la que Ducati permanece estancada: los precios. Que las Ducati son más caras que la competencia es una realidad, pero no la única, hay otros factores que han llevado a la marca italiana a tal situación. La Multistrada es el buque insignia, y el modelo más vendido del catálogo.La Panigale es una moto deportiva con toda la herencia de las que corren en MotoGP. Presume de tecnología y prestaciones, pero este tipo de motos ya no tienen tanto interés como hace años; y, la Monster, que siempre ha sido el modelo de volumen, acabó estrellándose cuando la marca trató de abaratarla prescindiendo del chasis tubular y sustituyendo metal por plástico. La han llegado a calificar como una moto china...
El precio es un problema como rebajar la calidad a unas motos de categoría Premium, pero también el hecho de que Ducati se ha centrado (más de la cuenta) en lo Premium. Sus modelos más baratos siguen siendo más caros que los rivales, y solo en Italia tiene buen cartel. Las casi 10.000 unidades vendidas en 2024 lo corroboran, pero en Estados Unidos o Alemania, la situación es muy diferente con 6.993 y 6.575 unidades, respectivamente, y cada vez menos.
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