Hola gente,
No he podido evitar contestar a vuestro post porque ahora mismo tengo una duda existencial dificil de resolver (ojo que viene tocho).
Actualmente tengo una KTM 950 Adv. "S" de 2003. La compré hace seis meses con 8.000 kms. Ahora tiene 20.000. Antes de ella tenía una Honda XR 650 con la que hacía "medio" enduro, corría carreras, etc...
Como moto esta máquina es absolutamente espectacular. Por campo no parece que lleves 200 kilos. El rendimiento está cercano a una moto de competición. Las curvas las toma sola, los frenos son de lo mejorcito, el motor empuja y empuja y empuja hasta que realmente te llegas a asustar. Con unos tacos puedes seguir por pistas y caminos rotos perfectamente a motos de enduro (otro cantar son las trialeras, cosa que no hago con esta moto).
Por carretera, para que os hagais una idea, acelera de 0 a 100 más rápido que una CBR 600 RR, y de 0 a 200 en el mismo tiempo. He salido de curvas con R1s y deportivas y no han podido pillarme. Parece una vacilada pero os lo digo para que os hagais una idea del rendimiento de esta máquina.
El crucero a 160 km/h en sexta levanta el motor a 6.000 rpms (es decir, casi cuando empieza a empujar de verdad... le queda aun muuucha vida). De punta tiene unos 235 km/h, pero yo no he tenido webs.
Cosas buenas: conducción off-road impecable, ese motorazo, esas suspensiones infinitas, para mi tamaño (1,85) es la moto ideal
Cosas malas: el sillón no es cómodo para largos recorridos, de todas maneras no importa demasiado porque la poca autonomía te hace parar cada 220 kms aproximadamente (21 litros de depósito, a mi me gasta unos 8-9 litros, dependiendo del terreno y el estilo de condicción).
La fiabilidad es muy cuestionable, sobretodo en los modelos 2003 como el mío.
Yo le he hecho 12.000 kms en seis meses. Muchos yendo a trabajar, muchos de asfalto, y tambien muchos de pistas y caminos forestales.
En este tiempo llevo: una junta tórica de culata que me esparció bastante aceite por el motor (era una chorrada, pero que susto), 3 (si 3!!!!) retenes de horquilla, una bomba de embrague, un cambio de líquidos de freno trasero por degradación y/o poro en el circuito (me quedé sin freno trasero en mitad de un viaje), una soldadura en el chasis (los modelos de 2003 se rajan, TODOS, así que cuidadín) y dos revisiones de 300 euros.
También petan bombas de agua, de hecho las aspas de plástico de la bomba se deshacen dentro del circuito de refrigeración por un fallo en la cadena de montaje, lo que hace que no circule agua y el motor acabe petando si no te das cuenta (esto a mi no me ha pasado).
La mala fama que tiene esta moto es porque se averían los motores (se joden las juntas de culata). Una vez aplicados los retrofits de KTM esto ya no pasa. Tengo que decir que en mi unidad lo que mejor funciona desde luego es el motor, como el primer día, impresionante.
KTM se hace cargo de todo en garantía, lo que pasa es que precisamente me cambié la moto para poder hacer más viajes largos, y me estoy encontrando que a veces me da miedo irme lejos, porque no sé que petará esta vez, así que me estoy planteando muy en serio cambiarla por una 1150 Adventure.
Los que tengais la 1150 no os ofendais, pero no tiene nada que hacer con la KTM en el campo. He llegado al punto de querer sacrificar eso por fiabilidad.
No obstante me consta que muchos de estos problemas están solucionados en los modelos posteriores al 2003.
Si sois comodones y os gusta pasear, no es vuestra moto. Si por el contrario os encanta la conducción deportiva, tanto on como off-road os la recomendaría, siempre y cuando fuera una unidad posterior al 2003, para evitaros estos incómodos problemas.
Os dejo unas fotillos de la máquina en acción (no soy yo, ya me gustaría

) esperando haber aclarado algunas dudas con respecto a su fiabilidad.
Saludos!