Hay una moto que no me perdonaré nunca no haber comprado.
Estaba en el año 2003 o 2004 paseando por Palma de Mallorca en un viaje que hice allí y vi un pequeño concesionario en el que había una Bimota YB11 que no se vendía ni a tiros con un cartel que ponía “Súper oferta - 5.800€”
La moto le gustaba y en rojo más pero estaba mirando la GS 1200 que estaba por salir o acababa de salir y en esa época pensé “dos motos para qué”.
Tonto de mí habría tenido un trozo de la historia motociclista en mi garaje y, con el tiempo, la inversión hubiera valido la pena.
Han pasado más de 20 años y aún me tiro de los pelos cuando me acuerdo.
Estaba en el año 2003 o 2004 paseando por Palma de Mallorca en un viaje que hice allí y vi un pequeño concesionario en el que había una Bimota YB11 que no se vendía ni a tiros con un cartel que ponía “Súper oferta - 5.800€”
La moto le gustaba y en rojo más pero estaba mirando la GS 1200 que estaba por salir o acababa de salir y en esa época pensé “dos motos para qué”.
Tonto de mí habría tenido un trozo de la historia motociclista en mi garaje y, con el tiempo, la inversión hubiera valido la pena.
Han pasado más de 20 años y aún me tiro de los pelos cuando me acuerdo.
Última edición: