Hola de nuevo amigos de la ESTRELLA.
El pasado día 10 inicié un viaje al norte con vistas a descubrir una de las provincias vascas por la que no había pasado, y decidí como no hacerlo con mis dos estrellas, la que lleva conmigo casi toda la vida y la otra con dos ruedas, el lugar elegido fue Vizcaya y como punto central Bilbao, desde donde iniciábamos y terminábamos las rutas.
Con vistas a evitar el calor nos pusimos en marcha a las 6:30 de la mañana y con dirección a Salamanca, para hacer la subida en varios tramos y haciendo algo de cultura Castellana tanto en Salamanca como en Valladolid (tres noches en total); la idea era llegar el domingo 13 a Bilbao y hacer tres rutas en los días siguientes, dos por la costa y otra por el interior.
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Elegí dos tramos por la carretera de la costa teniendo en común un tramo de la Ría de Mundaka, de manera que un día quedó a la izquierda de la marcha y al siguiente a la derecha, recorriendo así gran parte del litoral de Vizcaya.
Como no visita al cabo Machichaco
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y San Juan de Gaztelugatxe (imposible llegar a la Ermita de la cantidad de gente)
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Las rutas programadas no eran de mucha distancia, ya que nuestra idea era hacer desplazamientos tranquilos empapándonos de paisajes y vistas, sin prisas y sin el estrés de querer verlo todo. Queríamos empaparnos de las muchas tonalidades de verde y de la tranquilidad de rodar por muchos caminos en los que sólo pasan los lugareños.
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Para el tercer día y pese a salirnos de Vizcaya, decidimos dar el salto hasta el Santuario de Aránzazu en Guipúzcoa, para volver de nuevo a finalizar la ruta por el interior de Bilbao.
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El regreso lo hicimos volviendo por Burgos, Madrid y Úbeda en tres etapas para hacer más llevadero el viaje y darle un poco de “respiro” al pinzamiento de la espalda de mi mujer. Y como nó al decirle al GPS que quería evitar las autopistas, en el tramo de Bilbao a Burgos, hizo una de las suyas (sabemos que estos trastos tienen vida propia) y me llevó por el Puerto de Orduña, y para ser sincero me alegro del camino que eligió, el firme en perfecto estado y las vistas preciosas, el tráfico casi inexistente y una sucesión de curvas tras otra, en la que había que ir con precaución, pero muy muy bonita.
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Un viaje de unos 2.700 kilómetros aproximadamente en los que la ESTRELLA se ha portado como un cañón, con unos consumos super contenidos de 4,8 y 4,9 litros durante los días de ruta, (todo hay que decirlo con velocidades muy bajas y sin forzar nada de nada) haciendo el camino de regreso con consumos de algo más de 5 litros, y por otra parte con la sorpresa de consumos de algo más de 6 litros a la ida, que yo achaco a que íbamos subiendo y ganando altura. Las velocidades siempre dentro de los límites establecidos, todos sabemos que si se le aprieta al puño los consumos suben. Con velocidades moderadas en tres repostajes podía superar los 500 km.
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Los paisajes magníficos y muy buenas carreteras, siempre que no abandonábamos las vías principales, y por los caminos menos transitados, siempre por zonas asfaltadas aunque con bastantes baches.
Para evitar desagradables sorpresas durante varias sesiones de preparación de las rutas y con la ayuda de la Guía para BaseCamp de Despista2, recorrí en Maps los caminos para evitar desagradables sorpresas y viajamos con el 99% de posibilidades de no equivocarnos en los tramos; pese a eso en algunos había que apretar los dientes, (mucha moto y pocas piernas), con lo que las curvas ratoneras se pasa bastante mal, sobre todo por el exceso de peso del equipaje y el pasajero.
En resumen un viaje para repetir.
Saludos.