I
Iceman.
Invitado
Estrella de Mar dijo:Si os dáis cuenta, cada uno cuenta la historia según cómo la vive. Hay altos y bajos, gordos y delgados, rubios y morenos, guapos y feos, listos y tontos. Algunos de estos adjetivos son objetivos y valorables, pero otros son totalmente subjetivos.
Supongo que eso es lo que ocurre, que en una separación con hijos por medio se dan tantos colores (ni todo es blanco, ni todo es negro) que la Justicia sólo puede tirar de reglas encorsetadas, en lugar de valorar y estudiar cada caso detenidamente. Y, por otro lado, entrar en detalles puede retrasar hasta casi el infinito rupturas tormentosas.
[highlight]¿Podría valorarse cada caso de forma individualizada? No lo sé. Quien hace la ley, siempre hace la trampa. Y la expresión "mala persona" define por igual a padres y madres desconsiderados, a ex maridos y ex mujeres aprovechados, a falsos y a manipuladores. Yo sé que mi separación es de guante blanco, exquisita en el trato y en los detalles. Pero también sé que no es lo normal. Él no quiere niños, yo no quiero dinero. Pues cada uno con lo suyo.[/highlight]
Gusk75, gracias por este tema. Leer cada una de las respuestas invita a pensar. Gracias.
No sé si será posible valorar cada caso... De hecho no tengo muchas esperanzas de que se haga, pero se supone que la Leyes se hacen con el objetivo de impartir justicia y que sea lo más igualitaria posible. Por eso, no debemos conformarnos y dar por perdida la batalla. Seguramente, nunca se consiga este tipo de Ley, pero tenemos el deber y el derecho de tratar de mejorarla y que esto no se convierta en una lucha de intereses económicos en detrimento de la felicidad de nuestros hijos. Es triste que ellos sean, en muchas ocasiones, las armas arrojadizas de unos padres enconados y egoistas.
:-*