Ostia se me habia pasado y a jesus rt le dije que le diria algo tambien
Pues muy bien la verdad,he recordado otra vez lo que es una posicion trail desde que vendi la tiger y pille la r 1200r hara pronto dos meses.
La moto va estupenda.La primera sensacion despues de 3500km con el boxer es que la moto no tenia bajos ningunos,pero al cabo de un rato ya estaba familiarizado
Se comporta muy bien en todos los aspectos,es comoda ,agil y no cansa nada.Solo hice carreteras de curvas,un par de horas y llegue igual que como sali,cero cansancio,joder como añoro la posicion trail,enl la r es otro rollo
A ver no soy ningun super piloto ni nada por el estilo,eso si,tiquismiquis un poquito si..y si me preguntais que tal la version base pues os contestare que para mi perfecta,las suspensiones las encontre correctisimas,un poco suelta quizas la delantera pero se puede regular sin problema...................................
saludos
Hola… muchas gracias por tus comentarios…
Yo probé el otro día la versión SE… y coincido en la mayoría de las opiniones que se han expresado por aquí: es una moto fantástica.
Realmente me cuesta pensar en una moto más cómoda y agradable para viajar (excluyendo K1600, Goldwing y similares); es impresionante el confort, la postura de conducción, la finura de marcha, el tacto de todos los mandos, la respuesta del motor, la maravilla de las suspensiones, los frenos… todo en esta moto va bien, muy bien, dando como resultado una sensación realmente placentera al rodar sobre ella. De verdad, el que no la haya probado que lo haga porque le sorprenderá.
Hay que decir que no es una moto deportiva para volverte loco a hacer curvas a muerte y tramos muy ratoneros, ni por tacto ni por filosofía, aunque eso no significa que no sea rápida, que lo es y muuuucho…. Sino que las sensaciones que transmite en plan turístico son tan buenas que te olvidas de otra cosa nada más que disfrutar del paisaje, la carretera, los pueblos...
La moto es bastante ágil con la rueda de 17” y el ancho manillar ayudan a dar un buen equilibrio a la hora de abordar curvas, a pesar del peso que evidentemente está ahí pero que gracias a lo comentado y al buen trabajo de las suspensiones y todos los sistemas electrónicos la verdad es que en marcha pasa totalmente desapercibido.
Mención aparte merece toda la carga tecnológica que lleva esta moto; ya desde el primer metro que andas con ella te das cuenta que ahí debajo “se cuecen cosas”… y no lo digo por el calor del motor (bastante aceptable en este sentido), sino porque notas cómo entre la moto y el asfalto “hay algo” que hace que se sienta como una cosa homogénea, que gira en curva no solo sin hundirse sino como un conjunto sin oscilaciones y con una enorme precisión… y sin esfuerzo ninguno. La ensalada de siglas y sistema electrónico de seguridad… IMU, Kbst, Ktrac… (o como se llamen) hace un trabajo silencioso, pero impresionantemente efectivo. Las suspensiones absorben todas las irregularidades del asfalto, la moto va como flotando, pero a la vez no pierdes información de terreno… es algo difícil de explicar y digno de elogiar. Un magnífico y muy efectivo trabajo de Kawasaki en este sentido. Se nota la experiencia de Superbike.
El motor es otro protagonista, quiere ser discreto pues ni vibra, ni suena, ni da coces o brusquedades a ningún régimen… puedes hacer las rotondas en 5ª-6ª sin ningún problema, siempre te crees que vas en 3ª... pero la palanca de cambio ya no sube más arriba. Cuando llegas a medio régimen la dulzura sigue presente pero ya notas un empuje constante y contundente… y arriba… ¡¡buffff arriba!!!... despega… vuela… ¡¡magnífico!!.
Frenos sobresalientes, no se puede decir nada más.
Ergonomía perfecta… posición muy natural de todo; los mandos perfectamente accesibles, asiento y estriberas perfectos, buena protección de la pantalla (es la grande), suavidad de mandos… todo en su sitio y en la tónica de la moto… suave y agradable. El tablier es muy visible, la TFT no es muy grande pero es la que mejor se ve de cuantas haya visto yo, una luminosidad y definición perfectas. El cuentarpm como Dios manda; de reloj y bien grande.
Decir que el asiento del pasajero es espectacular, pocas motos (las antes mencionadas maxi-GT o una RT) tiene un asiento así para el pasajero; simplemente perfecto.
Otra cosa para destacar es el caballete… es tan fácil de subir que podrías hacerlo empujando con la mano. Increíble…a costumbrado siempre a pelearte con este artilugio en otras motos.
Lo que no me ha gustado… el quickshifter: de todos los que he probado en moto de calle es el que mejor va con diferencia… pero veo tan absurdos estos sistemas en motos de calle, por inutilidad y por poco agrado de uso. Subiendo si quieres cambiar sin embrague, a poca experiencia que tengas, no te hace falta QS… lo haces sin una rascada y con más suavidad que lo hace el dichoso QS... Y bajar marchas es sufrir… no lo usaría ni de coña para bajar marchas. Estos sistemas están pensados para motos de circuito, para ganar unas décimas en cada cambio y no fundir el embrague cuando llevas el motor muy alto de vueltas… pero en una moto de calle ¿qué sentido tienen ambas cosas?, para mi entender, ninguno… y mucho menos en una moto de orientación turística como ésta. Me pareció leer en el manual que se puede desconectar desde la pantalla TFT: sin ninguna duda prescindiría de él.
La otra cosa que no me ha gustado, pero que es inevitable, es el peso… pero si quieres tener una moto amplia, cómoda, aplomada, con capacidad de carga y motor gordo… es lo que hay, no puedes esperar el peso de una 250… “gordos y que pesen poco “ es difícil. Aún así, el peso se maneja razonablemente bien en parado… y en marcha no se nota.
Y poco más… como resumen me pareció una moto espectacular…con una carga tecnológica que la hace estar en el top (sino la más adelantada), que ha mejorado tanto respecto al anterior modelo que es casi como otra moto y que todo el que piense en grandes tiradas, con moto cargada y pasajero… ahora mismo creo que no tiene rival que pueda ofrecer lo mismo.
Perdón por la extensión.
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no va igual , si no mucho mejor, con las limitaciones de evitar el bajo rango de revoluciones donde no trabaja a gusto.
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